miércoles, 27 de diciembre de 2017

Uno di noi: Daniel Prodan

Hace no tanto tiempo, aunque parece una eternidad, un colega de pachangas me llamó para suplir una baja de última hora. Le conocía de jugar en Málaga capital, y cuando descubrí que esa cuadrilla de rumanos a la que nos enfrentábamos cada viernes vivía también en Vélez, le dije a Adrian que me avisara. Tardó, pero un día lo hizo. Así que ahí llegué yo, en una época en la que ya no competía, pero aún tenía cierto ritmo. Al calentar, ávido de sacar alguna anécdota entre tanto extranjero futbolero, les nombré míticos jugadores de su país, y en esas salió el personaje que nos ocupa hoy. Siempre me ha tocado los cojones que cuando alguien muere se le idolatre durante esa semana, sus greatest hits vuelvan a ser número uno en ventas y la gente se ponga su foto de perfil en las redes sociales (incluso yo lo he hecho con Chiquito). Pero qué coño! Este señor va a inaugurar una nueva sección en esta casa: no es un incomprendido, tampoco llega a ilustre, pero nadie le discutirá que es uno de los nuestros. Señores, con todos ustedes, Daniel Prodan. Por cierto, no me volvieron a llamar porque jugué como el puto culo.


Nacido en 1972 en Satu Mare, una ciudad al norte, en el vértice entre Ucrania, Hungría y su Rumanía natal. Debuta en el Olimpia, el club de la ciudad, donde llega a la máxima categoría, causando sensación en los ojeadores del Steaua, el más laureado club del país. Es en este equipo capitalino donde vive su época dorada, llegando a indiscutible con la selección rumana, cuajando un gran papel en USA'94, disputando la Euro'96 y ganando cinco ligas y dos copas nacionales. En la Champions de la temporada 95/96, se casca este golazo ante el Glasgow Rangers (ironías del destino como veremos más adelante). Por cierto, nótese la esvástica en la bandera del córner. Putos e inolvidables noventa... Recuerdo cómo tenía una revista que guardaba como oro en paño en la que hablaba de los equipos de esa temporada, aunque mi madre me la tiró en alguna limpieza clandestina. Por suerte yo apuntaba mis mierdas en unas libretas que guardaba con más celo. No pongo la foto porque si no esta entrada se va a retrasar aún más, que llevo un año con ella y este hombre se merece todos los honores.

Prodan vs Kiko
Al año siguiente, el Atlético de Madrid es emparejado en la fase de grupos de la Champions con el Qarabag digo... con el Steaua de Bucarest. En el debut del Atleti, en el Calderón, los rumanos sucumben por un incontestable 4-0. Fue mi bautismo europeo, quién  iba a pensar que más adelante iba a vivir... A lo que vamos. Yo tengo la teoría de que por muchos vídeos, cazatalentos y ojeadores, lo mejor para atraer a un equipo es que te vean en directo contra ellos. Así que lo cierto es que no hubo que esperar mucho, y el mismo que era alineado como central en esa mágica noche europea, recalaba en nuestras filas en el mercado invernal. Noche de Reyes del 97, y este taciturno rumano debuta con gol en la victoria ante el Extremadura. Ese año Antic le da cancha, y juega la mayoría de partidos. Es testigo de excepción del día que Raúl le hizo cosas malas a nuestro Juanma López, o de la remontada 5-4 del Barça en copa. Fue un año extraño, de extremos, con cuatro goles en diecinueve partidos. El año siguiente fue otra historia, y comienzan las lesiones. A pesar de ello juega veinticinco partidos, muchos de ellos junto a Vieri, que ese año fue la sensación. Su último partido fue una victoria ante el Sporting allá por abril del 98. En mi estuche escolar de la época tenía pegados a él, Jose Mari y a Bogdanovic. Hace más de veinte años ya joder...

Prodan a la izquierda entrenando con el Rangers
En esa época de frensí en el mercado de futbolistas, el Glasgow Rangers andaba fichando a lo loco y, o bien no leyeron la letra pequeña, o lo que leyeron era falso, o simplemente la lesión de Daniel fue a peor. Lo cierto es que se consumó su traspaso al club escocés, que luego estuvo apunto de querellarse con la directiva rojiblanca. De los colaboradores necesarios me espero cualquier cosa, pero me da que los guiris simplemente pecaron de incautos. El pobre Prodan, bajo la sombra de su maltrecha rodilla, vivió un calvario deportivo: no pudo debutar en Ibrox Park, y eso que estuvo en Glasgow más de dos años. El doctor Stewart Hillis, fallecido recientemente y que se supone que debía haber detectado que algo olía a chamusquina en el asunto, declaró que literalmente no tuvo tiempo de evaluar la situación porque había una rueda de prensa para presentar al jugador en 45 minutos. De locos. A pesar de la pena de no poder jugar más que partidillos contra juveniles, sus antiguos compañeros le recuerdan como alguien que trataba de hacerte reír, aunque se percibía en su interior la amargura de no poder ser útil para el club debido a su lesión.

En su periplo escocés, fue cedido al Steaua, donde solo disputa un partido y sale enseguida hacia el Rocar de Bucarest, un pequeño equipo donde se recupera de su lesión, y es subcampeón de copa contra todo pronóstico. De hecho, llega a jugar con la selección para tratar de clasificar al mundial de Corea y Japón, pero su rodilla, como se llegó a decir en medios escoceses, estaba hecha una manzana podrida. Sale de las islas definitivamente, y tras un breve paso por el National de Bucarest recala en el mercado invernal de 2002 en el Messina. Debuta en la serie B como ya hiciera con el Atleti, marcando un gol, cuando el equipo italiano estaba con uno menos y necesitado de puntos a más no poder. Regresa al final de la campaña al National de Bucarest, y al poco, tras plantearse jugar en la liga china, decide colgar las botas. Tras su última temporada en el Atleti jamás recuperó la continuidad, una pena esta retirada tan temprana y con un final tan sufrido en un central que podría haber contribuido deportivamente mucho más al mundo futbolero, si las lesiones hubieran mirado para otro lado claro. Ni el primero ni el último. 

Siguió vinculado al mundo del fútbol en la Federación Rumana, y posteriormente volvió a reencontrarse con su Atleti como embajador de la final de la Europa League de 2012, de grato recuerdo para todos. Ahí volvimos a tomarle la pista al bueno de Daniel, que presenció in situ el último 4-0 al Madrid como un atlético más. Quién iba a decir que pocos meses después de venirme su nombre a la cabeza en una pista de fútbol sala, este hombre iba a fallecer tan joven de un ataque al corazón. La vida es tan puta como el fútbol, y en este puto blog el fútbol da vida a cada historia. En ésta, siempre vivirá don Daniel. La revedere Didi!


sábado, 23 de diciembre de 2017

Sucedió en Cornellá

Tras darme cuenta que no tengo más fútbol en el móvil volví a galeras, esto es rojadirecta, y tengo que decir que se veía de puta madre, aunque para empezar llegué tarde al partido, y con mil interrupciones voluntarias del oficio más antiguo del mundo: ser padre. No me juzguéis, pero probablemente sea el partido al que menos atención le haya podido prestar... hasta que la cosa se puso fea: en el juego y en el cariz que estaba tomando el partido. Allá por el setenta, uno tenía la impresión de que podía saltar la liebre en alguna jugada aislada, como la que marró Kevin solo en casa. Entonces, cuando ni de coña pensaba en algo más que un cerocerazo o un gol de... Koke por decir alguien, que ahora que caigo nos habría dejado a 3 puntos del parca, va el viejo rockero de Sergio García y ajusticia nuestra falta de aplicación defensiva. Ah! Y de robo ni hablar. Que a Griezmann cuando juegue en el barca le pitarán esa supuesta pena máxima pase, pero hay que buscar el gol en vez de al portero cojones. Es lo que tiene jugar con hielo, que también te quemas. Respiraban los pericos, pecho henchido tras la machada, y nosotros con la misma cara tonto que el que pierda el clásico de mierda ese esta jornada.


Como en el año que ganamos la liga, la primera derrota ocurrió ante el Espanyol. Alguna vez tenía que pasar. Lástima que haya sido antes del paréntesis navideño. Este Atleti ha combinando durante su racha invicto partidos infumables, aceptables y algún que otro bueno, así que toca replantearse qué puede mejorar y felicitar a Don QSF, que no sé porqué tengo metido en la chorla que volverá algún día al Atleti. Ojalá, pero que sea dentro de muuucho tiempo. Ahora está por ver si se producirá algún cambio con la presencia de los nuevos y la salida inevitable de algún incomprendido. Me da a mí que no, pero sigo pensando que algún título puede caer, otra cosa es el valor. Ahora a esperar hasta enero, cuando volveremos a Catalonia, esperemos sin más pasaporte que el de un buen resultado que enjugue esta puta mierda de partido. Hasta entonces a esquivar ser falso con las felicitaciones en demasía y a vivir sin marcadores. Haber nacío guiri o israelí no te jode...

domingo, 17 de diciembre de 2017

Cuasi pesadilla antes de navidad

No me esperaba que hubiera pinchado el Sevilla, que perdiera el Valencia y menos aún a un Alavés con tanta personalidad y tan competitivo. Entonces surge la doble o triple ansia de ganar. De no haber conseguido los tres puntos nos habríamos tirado cabreados hasta reyes lo menos.

No carburábamos debidamente. El Alavés hacía el planteamiento que tantas veces ha hecho el Atleti de Simeone más de autor. No forzaron corners ni nada... La amenaza del empate se cernía sobre mí en el descanso mientras iba a por una cena. Algo sin embargo, me sacaba de esa zona de zozobra. Ya la habíamos cagado demasiado este año en partidos así, y esta gente venía de ganar dos partidos seguidos. Por ese razonamiento simplista pensaba que tocaba ganar y me tranquilizaba a mí mismo. Ahí me vino a la mente algo que no era una corazonada, sino más bien una reflexión ¿Y si fuera Torres? Porque el año pasado estuvo muy participativo en este mismo partido que abría la liga y porque me acordaba de un gol que había visto en youtube que le marcó al Alavés (más abajo lo pongo).

Pasaron los minutos, con más madera arriba y el tapete cada vez más inclinado hacia Pacheco. Pero qué huevos tiene el Alavés. Vaya manera de jugar sin complejos hasta el final. Supongo que será Abelardo, porque hasta hace poco iban de culo. Últimamente me entero que han echado a un entrenador cuando ese equipo juega contra nosotros, es lo que tiene ver solo noticias de fútbol que sean del Atleti.

Entonces llegó. Tras soliviantar Correa a la columna vitoriana cedió "al de últimamente" y Vrsaljko puso a ojo un balón para que "el de siempre" remachara. De similar guisa y con la misma pasión sin estridencias que hacía más de diez años le había visto en un vídeo de archivo pero con otro peso en el equipo. Lo digo siempre: gol de Torres vale doble. Y también digo que las jugadas donde Fernando hace daño de verdad son las que no tiene que pensar más que donde la va a poner, al primer toque. Me encanta que tengamos este tipo de jugadores con identidad y que encima sean útiles para el equipo como este hombre, cuyas arrugas faciales no hacen más que acentuarle la cara de Niño. Y hablando de niñatos, ¿Carrasco dónde estás?

lunes, 11 de diciembre de 2017

Estereotipos

Salió el Atleti a un campo talismán para el Cholo a enfrentarse a un club entrenado por un técnico amuleto para Simeone. El Real Betis salió a lo que se esperaba, hilvanar bien y tratar de pillar en entredicho al entramado defensivo atlético. Los nuestros salieron también a lo que se esperaba, aguantando sin sufrir en exceso, todo sea dicho, los intentos verdiblancos de desequilibrio con jugadores interesantes. Los sevillanos se empachaban de posesión de balón, pero la escuela guardioliana, con la que tantos y tantos técnicos se inmolan cual muyahidines, no es solo tener el balón, sino estar colocados perfectamente para robar en cuanto el rival tiene el balón en ese exiguo veintipico por ciento que la tenga, es dominar la estrategia, y no hablo ya de tener jugadores de primera talla mundial para interpretarlo. No hay más que ver cómo ganó en Old Trafford el Man City. De lo contrario, puede ser incluso perjudicial, se cae en ser previsible, para el rival y para ti mismo, y encima a la mínima te pillan en pelotas. Lo de ayer tarde quizá fue excesivo, pero a pocos nos sorprendió.


Se me despierta el niño de la siesta y al volver veo una jugada rojiblanca ralentizada. "Por fin despertamos", pensé fugazmente, pero paralelamente me daba cuenta de que era gol de Saúl. En la primera llegada dejábamos mudo a un Betis que hizo de todo en esa primera media hora menos lo que hicimos nosotros: crear una ocasión de peligro. Nótese el pase de gol de Nikola Tesla Vrsaljko. Se parecen un huevo nuestro lateral de exposición y el científico de origen balcánico ¿que no? Además, las existencias de ambos estuvieron y están rodeadas de un halo de misterio. El caso es que Diego Pablo alineó al croata, no se sabe si para sacarlo al escaparate (espero que no, porque eso significaría que oye a Gilma) o para demostrarle que cuenta con él. Lo cierto es que Sime, para estar tan fuera de longitud de onda, hizo un partido bastante potable. Muy protagonista en un partido donde las bandas del Betis dieron guerra. 


Cuando el Atleti se soltó más el pelo porque el Betis carburaba menos, fue cuando los manquepierda crearon más peligro, y el partido se puso bellísimo. Lo vi sin perder detalle excepto el gol y un rato tras el descanso porque me estaba preparando un copazo. Entre los peloteros que tienen arriba el que más me fascina, con el permiso del pisha, es Tello, que es muy veloz, pero su verdadero azote es su disparo. Si no que se lo pregunten a Oblak, que tuvo que demostrar que es el mejor portero del mundo, así, en seco. Encima vaya volea que se cascó el esloveno en un pase comprometido de un defensa, yo es que me fijo en esas mierdas. Y entonces llegaron los federales... es decir, salió Josemari Giménez, y se acabó el cachondeo. En vez de agitarse, el partido se ponía más tranquilo conforme llegaba el final. Yo creo que el Cholo al final acabó con seis defensas para descojonarse de Setién, cuyo Betis espero que se salve con la punta del nabo porque tiene mimbres para ello. Me voy a ver sorteo de la Europa League, la Champions es muy mainstream hombre...


Hablando de cosas mainstream: "Setién, ¿entonse yo juego guapo?"


miércoles, 6 de diciembre de 2017

La Orquesta del Titanic

Y se acabó. Sabíamos que era difícil, sobre todo por no depender de nosotros mismos. Por el baneo para fichar, por Allison, por el palo en el 91 en Roma, por el Qarabag, por un gran Chelsea que en ambos partidos demostró que aspira a todo este año... Un cúmulo de despropósitos que se han cernido sobre nuestra competición fetiche (la Europa League hace años que no lo es hijosdeputa chistosos). Tras cuatro temporadas siendo uno de los gallos del selecto corral europeo. Pasando siempre como primeros de grupo, torpedeando grandes transatlánticos del viejo continente, tras tantas previas inolvidables, tras muchos goles que nunca olvidaremos, tras derrotas sufridas tan cruelmente como dignamente las soportamos, se acabó la Champions este año cuando aún no están ni los belenes puestos.



No obstante, por si había alguna duda, los nuestros ayer se dejaron el alma ante un rival que sembraba el terror a cada llegada. Gran Chelsea este. El duelo de banquillos de alopécicos reinjertados esta vez no fue desigual, y aguantando cual Rocky, tuvimos nuestro momento tras el descanso. Palo de Filipe Luis, que lleva un par de partidos de capitán de facto, y en el córner de después Torres prolonga de cine para que Saúl, abonado a estas noches europeas (le quedan un montón aún) amartilló al viejo amigo Tibu. Lo celebré antes de que entrara y eso que sabía que en el Olímpico poco quedaba ya que rascar con el gol de Perotti. A mí me daba ya igual. Yo quería que el Atleti dejara el pabellón bien alto y ganar en Stamford Bridge era sinónimo. Ese gol recordó al de Adrián en las semis de 2014, y a tantos goles del ilicitano, y esas paradas de Oblak tenían aroma a los duelos imposibles contra Barcelona, Madrid y Bayern, donde sabíamos sufrir como nadie para elevar al cubo nuestras virtudes. Confío en volver a esos días. El justísimo empate blue fue solo una pizca de amargor en el buen hacer rojiblanco. Un orgullo ver la actitud hasta el final. Lástima de partidos ante el equipo azerbayano, que nos condenaron a llegar aquí vendidos. Lástima que Diego Costa no pueda emparejarse con Griezmann en la competición de competiciones. Fracaso. Eso está muy clarito. Y ahora que toca ir a galeras, valoramos como nunca el hecho de pasar de fase de grupos, algo que estos años era un axioma. La Europa League va a ser difícil de digerir, y es lo suficientemente peligrosa como para que nos encariñemos y nos apuñale también. Por eso hay que ir a por todas, con respeto, y volver más fuertes el próximo año. Solo queda dar las gracias por estos maravillosos años, donde en esta competición hemos hecho cosas que ni nosotros mismos hubiéramos imaginado, por dolorosas algunas, y muchas otras por increíbles. Hasta luego orejona zorra.

domingo, 3 de diciembre de 2017

Derroche

Derroche de coraje y de corazón como glosa nuestro himno. Pero también de ¡fútbol! Aquí ya entra la percepción personal de qué es fútbol con mayúsculas. Para mí va desde hacer una cobertura a un compañero a ser el que inicia la jugada para luego ser el que la remata al primer toque. Va de provocar un córner cuando estás herido y jalear al público, de jugártela sin tener que meter a cuatro delanteros sino porque aturrullas al rival con una asfixiante presión si procede. En medio de todo ello cuantas menos florituras más belleza, si no os vais a jugar al Fifa Street.


Hablando de derroche, también se dilapidó la primera media hora, pero más por mérito donostiarra que por demérito rojiblanco, si bien el partido en todo momento dio sensación de correcalles. Solo que tras adelantarse justamente el equipo txuri-urdin, la calle pareció más bien una cuesta de Antequera en favor de nuestro Atleti, que ya puestos a derrochar malgastó varias ocasiones (Luciano Darío Correa de mi vida tuvo 3) e incluso una de Gameiro en la que esperó la pelota y de paso desesperó a los que veíamos como el partido estaba jodido. Los sesenta minutos siguientes al gol de penalty de los gipuzkoanos nos permitieron ver a un Atleti solidario, creyente, obstinado y con recursos para hacerle cosquillas a un entramado defensivo muy potable. No veas si había gente defendiendo a cada embestida, y encima ojito a las contras, porque como digo jugamos a por todas, al filo de la navaja. Con dos cojones pero con la suficiente cabeza como para no acabar a cabezazos contra esa pared blanquiazul. Si nos quitan a Oblak el Rulli este no estaría nada mal.

Gran duelo, para quitarse la chapela el equipo vasco. Sí, cuando se gana todo es muy bonito ya lo sé. En clave colchonera, Filipe volvió y se casca un golazo con la derecha (entra limpio ese obús). Gabi sigue con esos cortes de balón en el último segundo para mandar al limbo ocasiones clarísimas, Koke dicen que está que se sale y que por eso vamos parriba (yo en los partidos me ofusco y apenas aprecio esos detalles pero me lo creo). A Griezmann parece que empiezan a entrarle. Thomas es un dechado de superación en el lateral... Pero en todo este estatus, a mí el que me tiene completamente entregado es Giménez, guardaespaldas de su mentor George Clooney Godín, al que tanto le debe. Este chaval es de otra pasta, y por mucha que nos dieran por él yo no le vendía. Además dudo que nuestro Josemari se quisiera ir.

Partido de esos que hacen afición. Saben más a gloria estas victorias que muchas goleadas a pesar del comienzo zozobrante (posible rival en Europa League esta erreala tan peligrosa). Jornada redonda también en la clasificación. El fútbol es una niña caprichosa. No hay mas que ver cómo va el Valencia y pierde ante un Geta con diez el día que pincharon Barsa y Mandril. ¿Por qué siempre tocan vascos contra madrileños la misma jornada? Supongo que lo trucan para evitar altercados porque ocurre en más casos. Sin ir más lejos la próxima jornada vamos a Heliópolis mientras que los palanganas van adonde las mocitas madrileñas. Antes habrá que derrochar un poco más de orgullo y de fútbol en Londres. Aunque esta vez con eso no bastaría. Si nos clasificamos me compro una camiseta del Qarabag.