DeLorean Colchonero - Copa del Rey 1992: "Hasta los huevos de perder con estos"

1992, uno de los años más importantes socioculturalmente hablando en la historia reciente de España. La Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona abanderaban este año bisiesto, en el que tan bien le fue a nuestro Atleti, que sorprendió en plan Dinamarca en la Eurocopa de Suecia de ese mismo año. Bueno, quizá no tanto. Ahí los laureles estaban más a la orden del día...

En liga (la primera de Tenerife) hicimos una temporada muy seria, terminando terceros y con opciones de campeonar hasta el final (Barcelona y Madrid quedaron delante nuestro). Ese año fue, con la salvedad del doblete, el último en el que estuvimos al nivel estándar del Atleti en su historia, esto es, peleando hasta el final por la liga. Más de veinte años han pasado...

En el torneo del KO, del que éramos vigentes campeones, comenzamos a jugar desde octavos. En esta primera ronda derrotamos al Real Oviedo tras remontar el 1-0 de la ida con un contundente 5-0 en el Calderón (goles como panes, y vaya potencia de Futre, buff).

Esperaba otro equipo copero por excelencia como el Athletic Club en cuartos. En la ida ya dejamos el pase finiquitado con un implacable 0-3. Vaya jugadorazo que era Futre madre de dios. Lo que me perdí por no nacer cinco años antes... En la vuelta nueva victoria por 1-0.

En semis enfrentamos a un modesto recién ascendido llamado Deportivo de la Coruña, que permanecería ese año en primera tras derrotar en la promoción al Betis con gol anulado a Kukleta (RIP) incluido. En la ida 2-0, y la vuelta en Riazor fue muy plácida con un empate a un gol:

Con esta trayectoria a nuestras espaldas llegábamos a la final. La cuarta vez que había derbi. Ya habíamos ganado dos envites como este en los años 60 y 61, dando lugar a nuestras dos primeras Copas. De hecho, de las siete que teníamos en ese momento, todas ellas habían sido ganadas en Chamartín. En el último partido de liga, jugado poco más de un mes antes, esto es lo que ocurrió según el diario ABC y su flamante hemeroteca:

"Un partido de poder a poder El estadio Santiago Bernabéu fue escenario ayer de un vibrante partido, jugado de poder a poder entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. La entrega y el esfuerzo de ambos equipos llevaron la pasión a las gradas abarrotadas de aficionados y a los millones de españoles que pudieron disfrutar del acontecimiento a través de la televisión. Cualquiera de los dos equipos madrileños pudo alzarse con la victoria y la emoción del resultado se mantuvo hasta el último minuto del encuentro. Al final, el triunfo del Real Madrid (3- 2) permite al equipo blanco acariciar ya la Liga. En las imágenes, un aspecto de las dos aficiones y de las fuertes medidas de seguridad que se tomaron."

Igualito que ahora vamos... Aún así veníamos de perder en este mismo estadio, pero esta vez nuestro técnico por aquel entonces, Don Luis Aragonés, arengó, según testimonio de alguno de los que estaba ese día en ese vestuario, tras explicar la táctica, más o menos de la siguiente forma:

"¿Lo han entendido? ¿Sí? Pues esto no vale para nada. Lo que vale es que sois mejores y que estoy hasta los huevos de perder con estos, de perder en este campo. Lo que vale es que sois el Atlético de Madrid y hay 50.000 que van a morir por vosotros. Hay que morir por ellos, hay que salir y decir en el campo que sólo hay un campeón y va de rojo y blanco".

Los punta de pelos se me ponen cada vez que lo leo, ni me quiero imaginar cómo sería oírlo en ese vestuario, antes de una final. El propio Bernd Schuster llegó a declarar que "nunca había salido tan motivado a un terreno de juego como ese día". Por una cosa o por otra, el Atleti se llevó la Copa en casa del vecino merecidamente, con un 2-0 certificado por dos golazos de Bernd y Paulo Futre.

Respecto al partido en sí, ya saben que, dentro de unos límites, no me gusta hablar de lo que no conozco. Así que me pillé la final y la he visualizado con todo detalle, y les doy un análisis bajo mi prisma objetivamente descerebrado:

La primera parte fue un baño del Atlético de Madrid, que controló el partido desde el inicio. Se adelantó con un golazo de falta de Bernd Schuster (cómo la tocaba el menda por cierto, bufff). El lanzamiento es fuerte a la par que colocado, con lo que el asqueroso de Buyo nada puede hacer. Se empezó la final como debe ser, enchufados desde el minuto -1 y aprovechando las ocasiones. Luego Moya desperdició una inmejorable, y tras una de las pocas llegadas de un desdibujado Madrid, contraataque y gol de pura potencia de Paulo Futre. ¡Qué trallazo al primer palo por dios! Esa bomba nadie podía esperarla desde ese ángulo. 2-0. Para finalizar el primer acto otra gran oportunidad marrada por el alemán tras una primorosa combinación entre Tomás, Futre y este último. Además de un penalty de juzgado de guardia que le hace Buyo a Schuster. ¿Cómo pudo no pitarlo? Vergonzoso.

En el descanso me llamó la atención ver al napias de Juan Carlos Rivero entrevistando a Villarroya (¿cuántos años tiene ya ese hombre por dios?). Lo de entrevistar en el entretiempo es muy old-school y ya o no se lleva o no se permite, y solo me lo llego a imaginar en los torneos de alevines del Canal Sur o de Cuatro. Por parte del Atlético entrevistaron a Juanito Rodríguez y a Orejuela (al que desconocía). Indagando me he enterado de que fue el injusto damnificado del teatro del cantamañanas de Paco Capullo en esta mítica jugada muestra del señorío merengue. Volviendo al tema, me sorprendió gratamente escuchar el optimismo comedido de las declaraciones de estos jugadores que estaban en el banquillo y la confianza ciega que tenían en el equipo.

El caño de Futre en la prensa

En el segundo tiempo el Atleti se cerró más para salir a la contra. Con la gente que tenía arriba y la jugosa ventaja como para no hacerlo. En esas llega para mí la jugada del partido: tras un robo de Manolo, la coge Futre lejos de la frontal, se zafa aún fuera del área de dos defensores, uno de ellos queda por los suelos. En la línea de fondo, cuando parecía que la iba a perder ante Chendo, que incluso se había desplazado a la izquierda en la primera parte para tratar, solo tratar, de anularlo. Cuando parecía, digo, que no le quedaban fuerzas, la recupera el "caballo loco", como un cuñado mío sabiamente llama, y se saca un sutil caño con el exterior y de espaldas para darle tres cuartos de gol a Moya, que incomprensiblemente falla mandándola alta. Éste fue sustituido luego por Alfredo, el que nos dio la Copa del año anterior. Tras ello Abel paró un cabezazo de Sanchís. Los blancos, sin dominar en absoluto, nos creaban más problemas. Pero sin embargo fallamos otra ocasión increíble de Vizcaíno tras nuevo jugadón de Paulo. Como última jugada destacable, la parada de Abel a Míchel en un penalty muy parecido al que Díaz Vega no quiso pitar en la primera parte. Ese fue el lance definitivo, y el Atleti no pasó demasiados apuros de ahí al final. Revalidábamos título tras hacer un partido de equipo grande. Nuestra octava Copa del Rey.

Por cierto, he llegado a leer a gente que dice que el Atleti ese partido dio leña. He prestado especial atención a ese aspecto, que tampoco me hubiera importado. Sin embargo se le mostraron 5 tarjetas por 4 al Madrid. Y de ellas, una por perder tiempo a Donato y dos en la misma jugada a Manolo y Soler por dar porculo en la barrera. Además vi a un Hierro con los codos y las manitas muy sueltas y a unos jugadores atléticos, encabezados por un inconmensurable López, entrar al corte noble y contundentemente. La única excepción fue una entrada de naranja de Schuster a la mona, pero en líneas generales nada de juego sucio. Partidazo de la A a la Z (de Atlético de MadriZ) de los colchoneros. Abel, uno de los pilares de esta victoria "de equipo", dijo en declaraciones la final del partido que "la Copa compensaba un poco la decepción de la liga". Igualito que ahora...

Futre, nuestro capitán, levanta el trofeo

Como no debía ser de otra forma, la prensa elogió el gran partido del Atleti, aquí les dejo una imagen que contiene la portada y página principal del diario ABC, que otra cosa no sé, pero reitero que tiene una hemeroteca que me viene de puta madre para escribir los artículos.

El Mundo Deportivo también ofrece periódicos antiguos, cliquen para ver las páginas dedicadas desde Cataluña a tamaño acontecimiento, que compitió con la primera victoria en 500c.c. de un español: Álex Crivillé.

Manolo owns Milla. (El Mundo Deportivo)

En el plano personal, ya que estábamos, le pregunté a mi cuñado del Atleti, harto conocedor del mundo del fútbol tanto como jugador como visionario. He aquí su escueto pero sincero testimonio: "de lo que yo me acuerdo, además de los dos golazos, es de Schuster... parecía que tenía ojos alrededor de la cabeza, cómo pasaba el balón, fácil, en corto, en largo... para mí un partidazo del alemán, sin desmerecer a todos los demás, claro".

Curiosamente tengo una reliquia conmemorativa de este logro. Es un simple llavero. Me lo compró mi padre en una gasolinera en la autovía de Málaga. Es de los primeros objetos atléticos que poseo, y lo llevaba orgulloso en la cremallera de mi mochila cuando iba al colegio.

 

En fin, he sentido orgullo del bueno al ver a un equipo con tantos cojones y buen fútbol en toda una final de Copa. Ni miedo escénico ni pollas. Un único campeón, y vestía de rojo y blanco, efectivamente Don Luis. Y 21 años después, mismo escenario pero diametralmente distintas mentalidades. Aunque si los jugadores lo dan todo no habrá ni un atlético que tenga nada que reprocharos. Cholo diles algo para el 17 de mayo...

Porque la afición del Atleti, es lo mejor y lo peor de este equipo. Lo mejor porque no para de animar y es fiel como pocas, estando siempre por encima de las circunstancias; y lo peor porque peca de conformista, al menos en los tiempos actuales, alienada por la maquinaria gilista y anestesiada por el hábito reciente de no pelear casi nunca por los títulos. Pero en una final, más que nunca importa lo primero, y de nuevo habrá 50000 dispuestos a morir por los nuestros. Así que ya sabéis cabronazos, dad hasta la última gota de cualquier secreción corporal que tengáis para tratar de ganar ganar ganar y volver a ganar.

Afición atlética el 27 junio de 1992

Afición atlética un partido antes de la final del 2013