Ilustres Atléticos: Aguilera

Queda inaugurada esta sección, en la que se hablará sobre jugadores que vistieron La Rojiblanca Colchonera de manera notable, y que pasaron a la historia atlética por ello.

Carlos Aguilera Martín, que no Juan Carlos, lo cual le molesta (probablemente el Juan se lo sacaron de la manga en alguna ficha oficial o algo por el estilo y se ha mantenido ligado a él de por vida) nace en Madrid en 1969. Este futbolista vistió la camiseta del Atleti en dos etapas, interrumpidas con un paso de tres temporadas por el CD Tenerife, que por aquel entonces jugaba en primera cuajando buenas actuaciones (luego volveremos a ello). Se desempeñaba como jugador de banda derecha indistintamente como lateral o más adelantado.

Proveniente del San Cristóbal de los Ángeles, su debut con el Atlético le llega a finales de la liga 87/88, y en la temporada siguiente, se estrena como goleador, he aquí una muestra de ello. Nótese el error en el rótulo del jugador en el vídeo, 29 años! Si en esa época tendría 19 para 20... Continuó hasta 1993, completando seis temporadas sin gozar de la titularidad en demasía, pero habiendo ganado las Copas del Rey de 1991 y 1992.

Adelardo(511p), Aguilera(454p), Tomás(463p) y Collar(470p)

Llegó a las Islas Afortunadas para quedarse tres temporadas, perdiéndose así el Doblete del 96. Esto es cierto, aunque será recordado indirectamente por el partido de la penúltima temporada de esa maratoniana (y maradoniana para nosotros) 95/96 de 22 equipos. 18 de mayo de 1996: Tenerife - At. Madrid, sacamos un sufrido empate a uno ante Chano y compañía. Viendo el resumen, me doy cuenta de que las pasamos más canutas de lo que recordaba, sobre todo en la primera parte. Recuerdo que ese día tenía la pierna escayolada (jugando al fútbol fue), y me regalaron un cojín relativo a esa temporada del Atleti, que aún guardo como platino en paño. En esa época tenía 8 años, pero créanme que recuerdo bastante del partido, que vi a caballo entre las casas de dos de mis hermanas porque mi madre estaba siendo operada de corazón (todo fue bien). Me reincorporo al nudo de la historia para hablarles de una jugada que tuvo lugar en el primer tiempo: cantada de Molina, ilustre que aparecerá por aquí si el blog sigue prosperando, y el balón le cae a la derecha para Aguilera, que lo escora demasiado y no anota un gol que ya cantaba el equipo chicharrero. Las muy malas lenguas dijeron luego que ya había firmado por el Atleti y que falló a posta, pero no tenemos ningún fundamento para debatir eso más que la profesionalidad mostrada siempre por Carlos. Aquí la jugada en cuestión (joya de resumen por cierto, media liga que nos llevamos de la isla).

Tras esas buenas temporadas en el Tenerife (clasificó a UEFA ese último año), volvió al equipo de su vida para, esta vez sí, ser un jugador de leyenda en la banda derecha. Este artículo del blog elrojoyelblanco (lo recomiendo absolutamente) menciona que tras el fallecimiento de su hermano, pidió salir de Tenerife para estar en Madrid cerca de los suyos. Tras ese amargo suceso, llegó a ser capitán durante muchas temporadas y es el cuarto jugador con más partidos oficiales disputados del club. En el plano nacional, jugó con España en 10 ocasiones y fue convocado para el mundial de Francia 98.

Para el recuerdo queda, por ejemplo, su asistencia a Kiko en este gol de esa trágica eliminatoria ante el Ajax. Además recuerdo que nos salvó el culo en Roma en 1/4 de UEFA del año 99 con este golazo. Pero por lo que más lo estimo, es por sus dos temporadas en el infierno, en ellas jugó más arriba, y con bien entrada la treintena anotó muchos goles importantes, como este. Uno de mis cuñados, ferviente atlético y sabio del fútbol, lo llama Incombustible Aguilera, yo creo que tiene razón. Tras la vuelta a primera, jugó tres temporadas más, perdiendo protagonismo paulatinamente. En su último partido, ante el Getafe en la 2004/05, tenemos la imagen siguiente, en la que le pone el brazalete a Torres, simbolizando el relevo generacional entre dos buques insignia de nuestro Atleti. 

Aguilera y Torres (año 2005)

Posteriormente, en una gran entrevista, creo que para lavidaenrojiblanco hablando de ese último encuentro declaró: “Yo estaba medio tocado, pero hablé con Ferrando y le dije que me gustaría retirarme jugando, no lo típico de ir al campo de traje y que te despida la afición. Así que pactamos que saldría de titular y luego me retiraría”.

Carlos Aguilera. Incombustible jugador y capitán muchas veces, que a pesar de no estar en el doblete lo vio de cerca, y al que sin embargo le tocó la responsabilidad de vivir una de las épocas más duras del Atleti. Más tarde me sorprendió verlo como comentarista en la Supercopa de 2010 (revisionando ese partido antes de la de 2012 ;)). El soso del locutor le decía al final que parecía que tenía la sangre de horchata: qué sabría él de lo que habrá  sangrado y sudado Aguilera por su equipo... Además, recientemente fue nombrado Director de Fútbol Base del club, esperemos que sus decisiones no vengan condicionadas por los de arriba, que lo haga tan bien como dentro del campo y mejor centrémonos hoy en su faceta como jugador. Concluyo con esta frase que nos regala en la misma entrevista: “EN UNA TEMPORADA, ME QUEDO CON LOS 365 DÍAS QUE SE VIVEN DE ROJIBLANCO”

Aguilera en la 2000/01

Fuentes: mundodeportivo, lavidaenrojiblanco, infoatleti, dbfutbol, elrojoyelblanco, youtube.